otro medio día...
mis ojos buscando tu silueta
como un lobo a la luna pura,
por su belleza,
Y que, entre sombras,
está escondida.
Necesito tu meliflua voz
que me salve del silencio oscuro y profundo,
cuál Eurídice, la luz en el Inframundo...
Busco tu tacto
como las flores al sol,
el décimo paso..
estamos a Salvo, mi vida,
somos ese libro escribiendose
entre historias perdidas,
Oculto en la biblioteca en llamas,
en un recuerdo escondido.
Un libro lleno de capítulos
Que dicen, "fueron felices",
pero sin un final.
No hay comentarios:
Publicar un comentario